El proyecto Erasmus es uno de los mejores intercambios para estudiantes el mundo. En Europa la gente más joven no sabe cuánta importancia tiene la libertad de movimiento y qué fácil es vivir sin fronteras. Quizás la gente mayor sí. Mis padres, que han vivido en un Estado comunista cerrado, tienen una perspectiva distinta.
La beca Erasmus permite
hacer intercambios a todos los estudiantes en Europa. En teoría todos tienen
que recibir el dinero suficiente para vivir y estudiar fuera de su país. En mi
opinión el proyecto es la mejor experiencia con la que puedes vivir como
estudiante. Para mi tiene más importancia que la carrera. En ese momento y en
el mundo que estamos viviendo cada día más.
Como todas las cosas, además
de características buenas, la beca tiene también cosas malas. Si pudiera hacer
cambios serían estos:
- Todos los
estudiantes que participan en el programa tienen que - ¡tendría que ser obligatorio! – seguir un
curso de lengua y cultura del país donde están viviendo. El curso debería ser
de al menos 6 horas a la semana. Esto viene financiado de la Unión Europea (UE)
y cada universidad tiene que hacerlo. ¿Por qué? Porque conozco a gente que fue
de Erasmus y al final no sabían nada del país, de la lengua, cultura,...
estaban ahí haciendo fiestas y saliendo solamente con otros estudiantes de
intercambio, o peor aún, con estudiantes de su propio país. Me parece fatal.
- Los papeles
(el papeleo) son la cosa más pesada del proyecto. Al final te pierdes entre la
burocracia y todo es complicado. Eso debería ser más fácil y simple. Podrían
montar un sitio web, un portal para que toda la documentación estuviera ahí y
fuera común para todos los países y que los contratos y becas se firmaran
electrónicamente con certificados digitales.
- Si existe una
residencia universitaria para estudiantes, tienes que vivir ahí. Así conocerás
personas nativas y, además, los precios de los pisos no subirían en las
ciudades más solicitadas.
- Que sea
obligatorio hacer al menos un semestre fuera, estudiando y viviendo. La UE nos
da la beca, tenemos muchos acuerdos y opciones con universidades en toda
Europa. No hay más qué decir. Hacerlo obligatorio sería justo y también muy
útil.
Vivimos en el tiempo de
la globalización pero también de fuertes movimientos de nacionalismo. En años
siguientes la perspectiva política y económica va a cambiar mucho en Europa. Veo
esto más importante que nunca que se construya una identidad europea que esté
abierta hacia otras culturas y que crezca con ellas.